El hallazgo de vestigios arqueológicos que datan de hace 2.200 años antes de Cristo (a. C.) y que pertenecerían al pueblo Quitu, primeros habitantes de esta ciudad, podrán observarse en el parque arqueológico y ecológico Rumipamba, en el noroccidente de Quito.

En las 35 hectáreas que conforman el parque se podrán observar los restos arqueológicos y la flora y fauna, como por ejemplo, el sendero de 200 metros rodeado de toctes, un tipo de árbol de la zona. Este camino une el parque de la Mujer con el parque Rumipamba.

El hallazgo fue presentado el pasado jueves, pero los estudios y excavación comenzaron hace dos años de la mano del arqueólogo Ángelo Constantine, líder de la investigación. Tras cavar más de tres metros se encontraron con el pequeño piso de una casa de forma semicuadrada.

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“Hasta el momento estos son los vestigios más antiguos encontrados en Quito; tienen una fecha de radio carbónico de 2.200 años a.C., correspondiente al periodo Formativo”, indicó Constantine, del Instituto Metropolitano de Patrimonio.

Danny Villacís, guía del parque y que trabajó en la excavación, manifestó que se hicieron análisis de restos de carbón del lugar y se hallaron evidencias de heces y orina de humanos.

También se encontraron partes de huesos de humanos y animales que pertenecerían a otro periodo y que presumen llegaron al lugar tras las erupciones del volcán Pichincha.

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Precisamente, junto al edificio hallaron también los vestigios de un lahar del volcán. “Lo que termina con este pueblo, según el arqueólogo investigador, es la erupción del Guagua Pichincha y después terminan de sellar esto las erupciones del Pululahua”, sostuvo Villacís.

Entre los restos encontrados en el edificio están una estructura de barro cocido cuadrangular, elaborada con mortero o chocoto, en cuyo interior se evidencian pajas quemadas. También se recuperaron muestras que se relacionan con el uso de fuego y sitios de descanso.

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Durante el primer recorrido por el parque, antes de la apertura al público, se presentaron evidencias del proceso eruptivo del Guagua Pichincha.

“Este hecho (la erupción) probablemente motivó a que la gente se reubicara. Sin embargo, también se puede evidenciar que (la gente) volvió a habitar este espacio alrededor de los años 700 u 800 después de Cristo (d.C.) por vestigios encontrados”, dijo Constantine.

Según el investigador, las indagaciones permitieron confirmar el inicio urbano de la ciudad: “Estamos seguros de que aquí se formó la primera planificación urbana dentro del Distrito Metropolitano”, acotó.

Bernarda Icaza, coordinadora del parque, afirmó que el hallazgo tiene una importancia “enorme”, pues “abre las puertas a nuevas investigaciones”.

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Años duró la exploración que permitió conocer esta cultura