El brasileño Neymar y el colombiano Radamel Falcao lideraron las victorias de sus equipos, París Saint-Germain y Mónaco respectivamente, este domingo en la segunda jornada, en el que fue el estreno del delantero carioca en el campeonato francés.

'Ney' estuvo implicado en los tres goles con los que el París SG derrotó al Guingamp (2-0). Primero presionando para que el defensa Jordan Ikoko anotase en propia puerta (52), después asistiendo al uruguayo Edinson Cavani con un pase al hueco (62) y por último marcando tras culminar una jugada, desde dentro del área y a pase de Cavani, que él mismo empezó (82).

Los parisinos suman de esta forma su segunda victoria consecutiva y celebran la llegada del delantero brasileño que capitalizó todas las jugadas de ataque.

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Deseoso de dejar una buena impresión, a Neymar se le vio muy activo. Se ofreció siempre y dejó toda una retahíla de fintas, pases y desmarques. Su estreno estuvo a la altura de las expectativas.

Poco antes del partido del PSG, Falcao hizo olvidar la suplencia del francés Kylian Mbappé, que se quedó en el banquillo por decisión técnica y nos disputó ni un solo minuto (a la espera de que se resuelva su futuro), y pronto abrió el marcador a la salida de un córner (3).

El brasileño Jemerson hizo el segundo (25) rematando otro saque de esquina y de nuevo el colombiano amplió distancias con una preciosa rosca desde fuera del área (37).

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Al filo del descanso, los locales -que suman dos derrotas en los dos primeros partidos de liga- anotaron el tanto de la honra a través de Wesley Said, que controló un pase en largo con la puntera y definió raso (43). Pero Falcao enterró cualquier esperanza para el Dijon con su tercer gol de la tarde, otra vez tras la salida de un córner (51).

PSG y Mónaco se aúpan al liderato de la tabla tras estos dos triunfos en otros tantos partidos y contabilizan ambos seis unidades, las mismas que el Lyon, Marsella y el Saint-Etienne del entrenador español Óscar García.

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Además este domingo el Lille perdió 3-0 ante el Estrasburgo en un duelo en el que el argentino Marcelo Bielsa llegó a usar hasta tres porteros distintos y agotó todos los cambios antes del descanso. (D)