El mundo del fútbol se solidarizó este viernes con el entrenador italiano del Leicester, Claudio Ranieri, despedido el jueves ante la sorpresa de todos, nueve meses después de haber ganado el título de la Premier League.

“Campeón de Inglaterra y nombrado entrenador del año por la FIFA. Despedido. Eso es el fútbol moderno, Claudio. Conserva tu sonrisa amigo. Nadie puede borrarte de la historia que has escrito”, afirmó el técnico portugués José Mourinho, quien también fue destituido siete meses después de ganar la liga inglesa con el Chelsea en 2015.

A la rueda de prensa, Mourinho apareció con una chaqueta de entrenamiento del Manchester United con las iniciales 'CR', en homenaje a Claudio Ranieri, en vez de 'JM' (José Mourinho), como de costumbre.

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“Las iniciales en mi chaqueta con su nombre es mi pequeño homenaje a alguien que escribió la historia más bonita en la Premier League. Alguien que merecería que el estadio del Leicester se llamara 'Claudio Ranieri' y al que han echado”, aseguró Mourinho en rueda de prensa.

“Creo que el Leicester ha entrado en la historia dos años seguidos: el primero porque consiguió lo más bonito, ganó la liga y escribió una de las historias más bonitas en la historia del fútbol, y ahora al tomar una decisión que a todo el mundo de este deporte le cuesta aceptar”, subrayó el extécnico del Real Madrid.

El anuncio de su salida del Leicester provocó muchas reacciones, como las de la exestrella y exjugador del Leicester, Gary Lineker.

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“Solté unas lágrimas ayer por Claudio, por el fútbol y por mi club. Por mí, por los numerosos aficionados que adoran este deporte”, dijo Lineker, quien calificó la decisión de “repugnante”.

El técnico italiano Roberto Mancini, uno de los candidatos a sustituir a Ranieri al frente del Leicester, también lamentó la destitución de su compatriota.

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“Lo siento por mi amigo #Ranieri. Quedará en la historia del @LCFC, en en el corazón de los aficionados del #Leicester y los amantes al fútbol”, escribió Mancini en la red social de Twitter.

El entrenador alemán Jurgen Klopp, del Liverpool -que precisamente jugará el lunes contra el Leicester-, consideró a Ranieri como “una persona verdaderamente especial en el mundo del fútbol, un chico realmente simpático”.

“Realmente no llego a entender por qué le (los propietarios) han hecho eso”, se preguntaba Klopp.

Por su parte, el entrenador italiano del Chelsea, Antonio Conte, expresó su tristeza: “Primero, es un amigo; segundo, es realmente un buen hombre; y tercero, es un supertécnico”.

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En Italia, el diario deportivo de la Gazetta dello Sport tituló “Ranieri despedido, los ingleses ingratos" y precisó que el "Leicester ensucia el cuento de hadas que había enamorado al mundo”.

El técnico de la Roma, Luciano Spalletti, tampoco entendió la decisión: “Es incomprensible, no hay reconocimiento porque fue él quien logró hacer que nazca esta alquimia en el equipo y en el vestuario que ha permitido ganar el campeonato”.

“Es un bonito trabajo, entrenador, ¿no es así? Siempre somos nosotros los que nos marchamos. ¿Han visto a un presidente, un responsable o a un jugador irse antes del final de la temporada?”, añadió Spalletti.

Sus asistentes en el Leicester, Craig Shakespeare y Mike Stowell, se harán cargo del equipo hasta el nombramiento de un nuevo entrenador.

Shakespeare reveló este viernes que había hablado con Ranieri diez minutos antes del comunicado oficial del Leicester.

“Parecía bien, pero un poco impactado”, señaló. “No sé si el club ha hablado con algún candidato. Lo que puedo decir es que mi relación con Claudio siempre fue buena. Hablé con él anoche y me dio las gracias por mi apoyo durante todo este tiempo. Estuvimos bastante tiempo intercambiando impresiones, pero lo que dijimos se queda en privado”, subrayó.

Shakespeare, negó que los jugadores cuestionaran a Ranieri y dijo que hay que “respetar la decisión de los dueños”.

“Había mucha frustración por los resultados del equipo, pero no había perdido al vestuario. Todo lo que se ha hablado ha sido pura especulación”, prosiguió. (D)