“Estamos contentos con Jonatan Álvez”, “queremos que se quede”, “solo se iría si hubiera una buena propuesta”. Esas son las respuestas que se han dado cuando se consulta a la dirigencia de Barcelona sobre la permanencia del uruguayo para la temporada 2017. Tras la frustrada transferencia del delantero al Necaxa, por la que los amarillos esperaban recibir $ 2 millones, una aseveración rotunda sobre el destino del jugador de 28 años no existe.