En el entrenamiento del Partido por la Paz (que se jugó el miércoles, en Roma), Diego Armando Maradona (Buenos Aires, 1960) se muestra otra vez en pantalón corto. Se le ve feliz. De fondo, una pantalla gigante muestra fútbol, el hábitat natural del que fue crack e ídolo para una buena generación de futboleros. A Diego le entusiasma hablar de su deporte, y lo hace en una entrevista reproducida por el diario deportivo Marca.

¿En qué momento de su vida se encuentra?
Paso una época maravillosa, feliz. Estoy con la gente que quiero, mis hijos y mi nieto Benjamín están sanos. Estoy en paz con todos, con Dios, y me estoy amigando con Francisquito, nuestro Papá, que representa la iglesia que siempre quisimos. Luego, en el fútbol, hablé con Infantino (Gianni, presidente de la FIFA) y me escuchó algo por lo que llevo luchando años: que el fútbol es de los jugadores, no puede ser de los dirigentes.

¿Qué es lo primero que haría si le dejaran la FIFA?
No puede ser que un dirigente que no le ha dado un puntapié a una botella mande sobre nosotros. Boban, Trezeguet, Hugo Sánchez, Ruggeri... he hablado con muchos y estamos de acuerdo en luchar por el fútbol. Infantino dice que va a colaborar.

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Pues Platini habrá sido una decepción, entonces.
Sí, no aportó nada al jugador de fútbol. Escupió en su plato de comida. Le hemos perdido el respeto. No nos representó.

¿Ha olvidado ya su carrera como técnico? (Su último club fue el emiratí Al Wasl en 2012).
No, para nada. Tengo ganas. Pero en el fútbol hay una mafia muy grande. No se quiere ver, pero existe sí o sí. El mundo de los entrenadores está dominado por los representantes, no por los méritos de uno u otro.

¿Cree que lo tiene difícil?
Yo jugué y pretendo enseñar fútbol como entrenador. Por eso, estoy abierto a entrenar, pero no pagando a esa gente. Ese cortijo (Diego utiliza la palabra argentina calesita) que se ha creado de técnicos que van del Valencia al Madrid, del Barça al City, del City al United... es increíble. Hace 15 años, a un Madrid o un Milan iba un DT libremente, ahora lo mandan los empresarios.

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Florentino le dio el Madrid a Zidane. ¿Espera una oportunidad parecida en alguno de sus exclubes?
Quizá yo no estoy para un Barça o un club grande, pero sí podría tener la chance en un equipo para luchar por cosas. Yo ya pagué lo que dejé a deber en mi época de jugador. Pero hoy en día parece que no basta haber sido un buen jugador para ser técnico. Por eso, me alegro cuando gana Zidane, porque él entiende al jugador.

Sobre técnicos, ¿cree que a Diego Simeone se le ‘debe’ una Champions?
Está haciendo un gran trabajo, y lo respeto mucho como persona y profesional. Él, con River, pasó de ser campeón a salir último; de la gloria al fracaso en pocos meses. Y hoy sigue en el alto nivel con un Madrid y un Barça que le sacan dos cabezas en plantilla. Las dos Champions las perdió apostando a lo suyo.

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Muchos lo acusan de un fútbol aburrido.
¿Pero dónde están los equipos alegres que ganan cosas? Sí, el Ajax está bárbaro, pero no gana nada. El Bayern vence todo en Alemania, pero si sale 100 kilómetros fuera de Alemania, se le complica.

Pep sí da espectáculo.
Guardiola es un chico fenomenal y todo bien, pero que no me hagan creer ese cuento de que el tiki-taka lo creó Guardiola. Yo conozco bien a la pelota y eso lo creó Cruyff, que fue el pionero.

¿Cómo ve la rivalidad Messi-Cristiano hoy en día?
Yo veo toda la Liga. Bueno, veo... todas las ligas. Leo y CR7 son superiores al resto. Cristiano me encanta porque siempre da la cara. Y lo de Lionel ya lo he dicho muchas veces y me aburre repetirlo: él no tiene que levantar la Copa del Mundo para ser considerado un fenómeno. ¡Basta ya de eso! Que si no tiene personalidad, que si no canta el himno... ¡Que le dejen en paz! El pibe tiene todo el derecho a renunciar a la selección, como hizo este verano. Y luego, salen de rodillas a pedirle que vuelva ¡los mismos que le criticaban antes! ¿Cómo es esta historia?

¿Cree que le quedan muchos años de reinado?
Creo que sí. A mí me sacaron de contexto lo de la personalidad de Messi. Aquel día yo le decía a Pelé que antes, en cada gran equipo, había cinco o seis cracks con personalidad. En Brasil, por ejemplo, que, por cierto jugaba casi sin arquero, estaban Pelé, Tostao, Rivelino, Carlos Alberto, Clodoaldo, Jairzinho... Yo, en la carita, le dije muchas veces a Messi lo que pensaba de él, por eso no me preocupó lo que salió aquel día. Me basta con decírselo a él. (D)

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Antes, Argentina exportaba jugadores por decenas , y ahora tiene dificultades para vender ni un 10%... ¿Y después de Messi, qué pasará? Diego Maradona, exfutbolista