Nuestra Tri tiene una superdeuda con la afición. Dos derrotas vergonzosas están minimizando una cuarta asistencia a un mundial de mayores. Es cierto que el balompié es impredecible, como también lo son los resultados, pero los análisis no se perderán de vista y son los que originan certezas y disentimientos.

Exponemos diez puntos de por qué la selección del Ecuador está en terapia intensiva, hablando futbolísticamente.

1. En los dos últimos duelos, Brasil y Perú fueron superiores desde el arco hasta el ala izquierda del rectángulo.

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2. Hay un fútbol idéntico en cada partido de nuestro combinado, lo que resulta fácil de descifrar para el rival.

3. El mediocampo es una área dubitativa y descoordinada, cuando debe ser la brújula de juego de la Tricolor.

4. En las últimas cuatro fechas el poder ofensivo ha sido de bajo nivel técnico y de poca creatividad.

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5. El fútbol actual precisa que los laterales tengan vocación ofensiva y, en esta parte, Ecuador olvidó este abecé.

6. El cuerpo técnico debe profundizar más el trabajo físico y técnico con los integrantes del combinado nacional. Ambos referentes quedan en deuda.

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7. La altura es un índice de ventaja, sí, nadie lo duda, pero con jugadores que habiten y jueguen en ciudades ubicadas a ese nivel de terreno.

8. Hay jugadores que brillan en los diferentes equipos del exterior y quizás por cuidar sus piernas descuidan la casaca de la patria donde nacieron.

9. No soy partidario del cambio de técnico, pero no debe nacer ni crecer necedad en el ambiente de la Selección.

10. Es melancólica la posición en la tabla, amerita una reunión grupal y volver a defender a la patria en el gramado. Si no es así, adiós Rusia 2018. (O)

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