La decisión del astro Kevin Durant de marcharse de los Thunder de Oklahoma City, donde pasó nueve campañas, para unirse a los Warriors de Golden State ha incendiado a la NBA. La decisión de Durant reavivó el debate sobre los astros que dejan a sus equipos para buscar un título en otro lugar.

Durant optó por vestirse el uniforme del equipo que eliminó a Thunder en la última serie por el título de la Conferencia Oeste. “Si no puedes vencerlos, únete a ellos”, escribió en Twitter Paul Pierce, alero de los Clippers de Los Ángeles.

Para expresar su descontento, los aficionados de Thunder quemaron camisetas que llevan el nombre y el número (35) de Durant, y han hablado de supuesta traición en los videos publicados en redes sociales.

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“Kevin tiene el derecho de tomar las decisiones que considere mejor para él, ya que se ha ganado ese derecho. Debemos darle las gracias por todo lo que ha hecho por este equipo, por la ciudad. Él contribuyó con su tiempo, con su dinero también”, dijo Sam Presti, gerente general de Oklahoma City.

El bosnio Jusuf Nurkic, alero de los Nuggets, tampoco coincidió con la decisión de Durant. “Un equipo te vence, ¿y te mudas allá? Las superestrellas no hacen eso”, reclamó. (D)