La modesta Islandia apagó la estrella de Cristiano Ronaldo y su Portugal tuvo que conformarse con un frustrante empate 1-1 en su debut en la Eurocopa-2016, este martes en Saint Etienne, en el cierre del grupo F que lidera en solitario Hungría tras sorprender a Austria (2-0) en Burdeos.

La conclusión de la primera jornada de todos las llaves de Francia-2016 estuvo movida durante la mañana con el anuncio de la UEFA sobre su proceso disciplinario contra Rusia a propósito de los serios incidentes que generaron sus hinchas el sábado pasado en Marsella: “descalificación en suspenso” de la Eurocopa, es decir, la exclusión inmediata del seleccionado ruso en caso que sus aficionados vuelvan a protagonizar incidentes dentro de los estadios antes del final del torneo.

Los amantes del fútbol esperaban olvidar a los hooligans que han empañado el comienzo del certamen continental y la mejor opción era ver un concierto de Cristiano Ronaldo, quien igualó al gran Figo con 127 selecciones, pero no pudo marcarle a la debutante absoluta Islandia, que evitó que el punta del Real Madrid entrara a la historia siendo el primer jugador en marcar en cuatro ediciones diferentes de Eurocopa, desde su debut en 2004, donde fue subcampeón.

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Nani adelantó a los portugueses en el 31, firmando así el tanto número 600 de la historia de la Eurocopa, pero Birkir Bjarnason igualó en el 50 con otro gol para los libros, el primero de su país en un gran torneo.

Este reparto de puntos en Saint-Etienne dejó a Hungría como primer líder en solitario del grupo F, gracias a su victoria por 2-0 sobre Austria, en un partido en que no era favorito y lo pudo ganar bien, en su regreso a la Eurocopa desde su cuarto puesto en 1972.

Con un bonito gol del punta Adam Szalai (62) tras una doble pared con Laszlo Kleinheisler y una definición picante de Zoltan Stieber (87), se llevó tres puntos de oro.

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El conjunto austríaco terminó con diez hombres por expulsión del central Aleksandar Dragovic por doble amarilla (66), limitando las posibilidades de reacción.

El dato de color fue que el arquero húngaro Gabor Kiraly se convirtió en el jugador más veterano en disputar un partido de fase final de Eurocopa con 40 años y 75 días (quebró el récord del alemán Lottar Matthaus). (D)