Los clubes de Chicago, los mejores de las Grandes Ligas

A poco más de un mes de haberse iniciado la actividad en las Grandes Ligas siempre es interesante saber cómo andan sus equipos favoritos. Los de Chicago, los Cachorros y Medias Blancas, por ahora, lideran en sus grupos las tablas de posiciones.

Los Cachorros, que no ganan desde hace 108 años una Serie Mundial, son los mejores entre todos los 30 equipos. Encabezan la Liga Nacional y comandan la División Central al sumar 21 triunfos y seis derrotas. Mientras, en la Americana, Medias Blancas comandan la División Central con 19 victorias y 10 pérdidas (al momento de elaborar esta columna).

Tal como en las últimas campañas algunos peloteros latinoamericanos lucen gran nivel y lideran algunos de los departamentos ofensivos y defensivos y son factores claves para el rendimiento de sus novenas. Así ocurre con Francisco Cervelli, Starling Marte y Gregory Polanco, quienes contribuyen con el mejor promedio de bateo colectivo de la Liga Nacional.

Sus actuaciones tienen a los Piratas de Pittsburg en el segundo casillero y luchan partido a partido con los Cachorros para tratar de ir al cuarto año consecutivo a la postemporada. El trío Cervelli, Marte, Polanco nos recuerda que podrían iniciar una dinastía en los Piratas, como la que conformaron en 1971 cuando Roberto Clemente y Manny Sanguillén fueron a una Serie Mundial. Y la de Omar Moreno y Rennie Stennett, que hicieron delirar en 1979, al ritmo de la famosa canción We are family, con la coronación de ese año.

Son muchos los peloteros latinoamericanos de gran nivel, tantos que se podría armar una poderosa novena de estrellas. ¿Que les parece el siguiente equipo?: Lanzador, Félix Hernández, de Venezuela; en la receptoría Yadier Molina, de Puerto Rico; en la inicial el llanero Miguel Cabrera; en la segunda Robinson Canó, de República Dominicana. En las paradas cortas otro venezolano, Elvis Andreus. En los jardines Yoenis Céspedes, de Cuba; el venezolano Carlos Gonzáles y el boricua Carlos Beltrán.

La presencia de los beisbolistas latinos es cada vez más influyente. Con la nueva oleada de los cubanos, el mercado de los pases se disparó. Algunos reciben enormes cantidades de dinero y se estima que varios están sobrevalorados. Pero los estadounidenses no son ingenuos para regalar sus recursos.

Las enfermedades y lesiones producen impactos y perjudican planes y proyectos en el intento de armar buenos equipos. El venezolano Pablo Sandoval –decisivo para que los Gigantes de San Francisco ganaran la Serie Mundial en 2012 (fue Jugador Más Valioso) y 2014– es el caso más notable en la actualidad. Los Medias Rojas de Boston le dieron un contrato de $ 95 millones por cinco años, pero hasta ahora no justifica su fichaje. Se descuidó de su peso corporal, no ha tenido mucha acción, se le rompió el cinturón en un movimiento de bateo y el público lo empezó a criticar. Para rematar el Kung Fu Panda se lastimó un hombro izquierdo y no jugará el resto del año, lo que lo alejó de toda la temporada del 2016.

En esta campaña se anunció la realización, en el estadio Hiram Bithorn, de San Juan, de un homenaje a la enorme producción de brillantes peloteros boricuas, en especial de Roberto Clemente. Iba a ser en honor de quienes dieron lustre a las Grandes Ligas y estaba programado para el 30 y 31 de mayo, con series entre los Marlines de la Florida y los Piratas de Pittsburgh, pero parece que van a cambiar la sede por los temores de contagio del virus del zika.

Mientras, los fanáticos ya pueden escoger, mediante votación en internet, a sus peloteros favoritos para que participen en el Juego de Estrellas, que este año se efectuará el próximo 12 de julio en el Petco Park, la casa de los Padres de San Diego.

Y mientras los de Chicago están en la cima, hay equipos que rondan el frío y lúgubre sótano de la tabla por no ganar muchos partidos. Ahí esán los Bravos de Atlanta, que fueron gloriosos en la década de los noventa. Tienen siete ganados y 20 perdidos. Y los Mellizos de Minnesota, con ocho victorias y 20 caídas.

Tal como lo señalaron los pronósticos, los Yankees son colistas en el Este de la Americana, es el peor tercero de todos con solo nueve ganados y 17 perdidos. Su mal momento es producto de un cuerpo de lanzadores que no aseguran nada. Ahora esperan que luego de cuatro duelos pueda jugar el cubano Aroldis Chapman, que está suspendido. Pero recordemos que él solo es cerrador, función que cumplía el magistral Mariano Rivera.

Los Yankees, con un desastroso arranque, tienen la segunda nómina más cara, con algo más de $ 214 millones. Tienen a jugadores como C. C. Sabathia, quien recibe sueldo de $ 24 millones anuales, pero es hoy el último lanzador de la rotación y está tratando de superar problemas de adición al consumo de alcohol. El inicialista Mark Teixeira tiene sueldo de $ 23 millones y su rendimiento es muy bajo. Jacoby Ellsbury cobra al año $ 21 millones, el japonés Masahiro Tanaka $ 22 millones por cada temporada, pero está saliendo de molestias en su brazo. Bajos desempeños son motivos más que suficientes para que los Mulos del Bronx estén donde pocas veces han estado y sus fieles e impacientes fanáticos no lo soportan. (O)

Los Yankees, con un desastroso arranque, tienen la segunda nómina más cara. Son el peor tercer equipo de las Mayores y son colistas en la División Este de la Liga Americana.