En los minutos finales del Clásico del Astillero por la primera final del campeonato ecuatoriano, Ismael Blanco se llevó el protagonismo del encuentro. El artillero argentino apeló a su astucia para marcar a los 89m y emparejar el marcador a 1 en los primeros 90 minutos de la gran final del torneo local.

Así, Blanco volvió a frustrar a los eléctricos, algo que ya se le ha hecho costumbre en esta temporada, pues lo hizo en los dos clásicos anteriores. El argentino anotó en las dos victorias de Barcelona en la segunda etapa 1-0 en el Monumental y 0-1 en el Capwell.

Ahora no fue un triunfo para los amarillos, pero el empate es mejor que ir el domingo con un resultado en contra al fortín azul para definir la corona.

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“Cometimos muchos errores queriendo salir jugando. En el segundo tiempo mejoramos bastante, son 180 minutos y el equipo está fuerte”, comentó Blanco luego del partido.

Con 12 anotaciones, Blanco es el máximo artillero de Barcelona, equipo al que llegó recién en agosto pasado.

Ahora resta la final en el estadio Capwell este domingo. “Sin duda el resultado deja abierta la serie. Veíamos afrontar el partido con la tranquilidad y tenacidad necesaria”, expresó en delantero torero.

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El día del encuentro de la primera final en el estadio Monumental, Blanco recibió una motivación especial, la de su familia (esposa e hijos), que lo visitó sorpresivamente en el camerino y lo acompañó antes del pitazo inicial en la cancha del estadio.

La misma muestra afectiva recibieron otros jugadores del plantel canario. (D)

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18 partidos ha jugado Blanco con Barcelona este año.