La caldera del Capwell vibró anoche desde el primero hasta el último minuto del partido disputado entre Emelec y Sao Paulo en el duelo de vuelta de los cuartos de final de la Copa Sudamericana. En las gradas del estadio, el público terminó de pie, y en la cancha los jugadores eléctricos arrinconando a sus rivales brasileños, pero faltó un gol.