Dos alemanes, excampeones mundiales de fútbol, murieron el fin de semana: Ottmar Walter, uno de los héroes de Berna en 1954, y Heinz Flohe, integrante del monarca de 1974.

Walter, exdelantero que marcó 336 goles en 321 partidos en el Kaiserlautern, brilló en la selección que derrotó 3-2 a los húngaros en la final del Mundial de Suiza 1954. Murió ayer en un hospicio a los 89 años. Jugó 20 compromisos internacionales y anotó 10 tantos.

En tanto que Flohe, miembro del cuadro germano del mundo en Alemania 1974, falleció el sábado a los 65 años en su ciudad natal, Euskirchen. Estaba en coma desde mayo del 2010.

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El volante ofensivo desarrolló la mayor parte de su carrera en el Colonia, club con el que consiguió el doblete Bundesliga-Copa alemana en 1978.

Fue 39 veces internacional y terminó su carrera en 1980 en el club Múnich 1860, después de 343 partidos en la Bundesliga.