Gobierno colombiano y las FARC inician diálogos de paz

El gobierno de Colombia y la guerrilla izquierdista de las FARC inician hoy en La Habana una negociación de paz con la que buscan poner fin al conflicto interno armado de casi 50 años, el más prolongado del hemisferio.

En la cita se abordará la política de desarrollo agrario integral, que es el primer tema que estará sobre la mesa y que forma parte del reclamo histórico del levantamiento armado del grupo guerrillero que demanda una reforma agraria que brinde acceso a las tierras a los campesinos pobres.

El temario también incluye el acceso y el uso de la tierra, programas de desarrollo con enfoque territorial, infraestructura y adecuación de tierras, desarrollo social (salud, educación, vivienda, erradicación de la pobreza), estímulo a la producción agropecuaria y sistema de seguridad alimentaria.

En la participación política, otro tema en agenda, se discutirán los derechos y garantías para el ejercicio de la oposición política en general y de los nuevos movimientos que surjan de la firma de un pacto final de paz. Contempla también el acceso a medios de comunicación para nuevos movimientos políticos, mecanismos democráticos de participación ciudadana y medidas efectivas para promover una mayor participación en la política nacional, regional y local de todos los sectores, incluyendo las poblaciones más vulnerables, en igualdad de condiciones y con garantías de seguridad.

También se discutirá la posibilidad de que varios jefes de las FARC acusados o condenados por delitos de lesa humanidad y graves violaciones a los derechos humanos vayan a la cárcel. Iván Márquez, jefe del equipo negociador de las FARC, dijo que los comandantes insurgentes no irán a prisión.

Otro tema es el fin del conflicto que demanda el cese al fuego bilateral y definitivo, el abandono de las armas y la reincorporación de las FARC a la vida civil. En esta fase, el gobierno debe revisar la situación jurídica de los guerrilleros encarcelados y estar alerta a la acción de grupos armados ilegales que se oponen al plan y que buscarían sabotearlo. Un ataque de la guerrilla de gran escala o la muerte de un líder rebelde podría truncar la negociación.

En la cita también se va a hablar sobre una solución al problema de las drogas ilícitas que incluye programas de sustitución de cultivos, recuperación ambiental de zonas afectadas por la siembra de cultivos de hoja de coca, planes de prevención de consumo y la solución a los fenómenos de producción y venta de narcóticos.

Las FARC son acusadas de obtener millonarios recursos de la producción y el tráfico de cocaína, por la que son consideradas como un cartel de las drogas, pese a que lo niegan.

También se tratará sobre las víctimas. Buscarán resarcir a los afectados del conflicto y garantizar la verdad de lo que sucedió con cientos de ellas que aún están desaparecidas.

El gobierno colombiano dispone de una ley para indemnizar a miles de víctimas de la confrontación. Después de que se logren acuerdos definitivos en todos los temas se avanzará a la implementación y verificación. El diálogo se cumplirá con el principio de “nada está acordado hasta que todo esté acordado”.

En tanto, a propósito de las negociaciones de paz, mañana un centenar de representantes de la Unión Europea, el gobierno colombiano y la sociedad civil del país andino abordarán en Bogotá un diálogo sobre la situación de los niños y las minorías étnicas dentro del conflicto armado interno.