La abogada Anunziatta Valdez, del movimiento de mujeres, se opone a la eliminación de la Ley contra la Violencia a la Mujer y Familia ,que plantea el proyecto de Código Orgánico Penal Integral (COPI). Dice que este último no garantizará la protección a las mujeres como lo hace la llamada Ley 103.

¿Por qué sustituir las medidas de amparo de la Ley 103 por las cautelares del COPI no garantiza la protección de la mujer?
Es perjudicial para las mujeres que sufren violencia porque las medidas de amparo son preventivas, se pueden dictar en cualquier momento y la mujer puede solicitarlas aun antes de que se dé la violencia. Por ejemplo, puede pedir una boleta de auxilio cuando teme que pueda darse la agresión.

¿Cómo cambiaría el panorama con el recurso de medidas cautelares? Estas podrán ser pedidas una vez ocurrido el hecho, es decir, no hay prevención.

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Es decir, ¿la mujer tendrá que exhibir un morado, sangre u otra evidencia de violencia?
Evidentemente. No podrá pedir por el temor a ser violentada, sino que tendrá que esperar a que la violenten y se judicializa el trámite, porque para que se dé la medida cautelar (el pedido) pasa a un fiscal, quien debe investigar. Eso tomará meses, se emitirá un dictamen acusatorio y (el tema) pasará a un juez, quien convocará a una audiencia y allí recién podrá dictar la medida.

¿Qué efecto tendrá eso?
En la práctica el procedimiento será largo porque el volumen de denuncias en las comisarías por violencia intrafamiliar, según el Consejo de Mujeres en Transición, alcanza a un promedio de 100 mil anuales, y solo hay 700 fiscales. Las mujeres quedan desprotegidas porque no pueden acceder a una justicia eficaz, inmediata, sino que tienen que esperar que el hecho se dé.

La otra parte podría argumentar que de esta forma se garantiza un mejor debido proceso...
Hay problemas sociales que no se pueden tratar con un criterio como el que trata de imponer el COPI, porque son el resultado de relaciones inequitativas del poder. El debido proceso aquí no funciona.