Enfrentamientos entre policías, militares y comuneros se registraron la mañana de este miércoles en el sector de Icto Cruz de la parroquia Turi, en Cuenca, en donde se construirá un Centro de Rehabilitación Social.

Tras los incidentes, el gobernador del Azuay, Humberto Cordero, señaló que las máquinas volvieron a trabajar a las 11:11, luego de casi una hora de paralización.

El funcionario agregó que el comandante de Policía, Lenin Bolaños, fue agredido y que se detuvo a tres personas, quienes serán juzgadas por los fiscales de flagrancia que estuvieron en el lugar.

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"Esta obra esperó dos años para concretarse y las obras durarán de doce a catorce meses", indicó el gobernador.

Unos 500 uniformados resguardaron la zona.

Un helicóptero de la Policía Nacional sobrevoló la zona donde se construye el centro carcelario. En esta aeronave llegó el alcalde de Cuenca, Paúl Granda, quien intentó bajarse para dialogar con los ciudadanos, pero a último momento desistió y continuaron los sobrevuelos.

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“Cumplimos con todos los permisos y estudios que exige la ley. No desalojamos a nadie porque los terrenos son municipales ni les quitamos cultivos, por tanto, la oposición es incomprensible", dijo Granda.

Una vez que las máquinas retomaron el trabajo, Cordero anunció que se instalará un puesto de vigilancia permanente con más de 60 policías y militares que garanticen la continuidad de la obra.