Tres lluvias fuertes que cayeron en el lapso de una semana en la península de Santa Elena bastaron para que brote petróleo del subsuelo y vaya a parar en los canales de aguas lluvias, poniendo en riesgo de contaminación al mar y a un sector de Punta Carnero, en el cantón Salinas, así como otras zonas del vecino cantón La Libertad.