En el marco de la entrega de becas a los abanderados de los colegios fiscales de la provincia del Guayas, el presidente de la República, Rafael Correa, pidió ayer a los estudiantes y padres de familia que “no se dejen manipular” por grupos interesados en que nada cambie en el sector educativo. Uno de esos, dijo, es la Unión Nacional de Educadores (UNE).

Según Correa, el gremio de maestros puso “como carne de cañón” al estudiante Édison Cocíos en una manifestación en Quito hace un mes y ahora el joven “se debate entre la vida y la muerte. Volvió a terapia intensiva”, informó.

Las críticas a la UNE incluyó a sus dirigentes. Recordó que estos han protestado por la evaluación a los maestros, por la obligación de que trabajen ocho horas en un solo plantel y recordó que el pasado 30 de septiembre del 2010, durante la sublevación policial, la entonces presidenta del gremio, Mery Zamora, “sacó (a las calles) a los estudiantes del (colegio) Aguirre Abad, pese a los peligros que había”.

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Correa también defendió la implementación del bachillerato unificado en medio de centenar de alumnos.