¿No te satisface?

Querer gozar de una vida sexual placentera no significa que seas una mujer perversa. Es algo natural.

Muchas veces hay amor entre dos, pero dentro de la habitación cohabita el miedo, la frustración y hay, también, silencio de muchos años.

Hay mujeres que creen que el compañero debe suponer lo que ella quiere  y que la relación sexual entre dos personas que se aman se da de manera espontánea. Pero como él no es adivino debes hacer algo y ya.

Así como hay que manejar las cuentas claras con respecto al dinero y la educación de los hijos es válido perfeccionar la comunicación sobre el sexo.
Aunque no se reconozca abiertamente, en muchas alcobas ecuatorianas hay insatisfacción sexual.

Según la orientadora familiar Cecilia Chávez de Larrea esta insatisfacción causa mucha frustración en ambos.

En la mujer puede además generar una sensación de desvalorar a su pareja en cuanto a su masculinidad, por cuanto se espera que sea el hombre quien ‘cumpla’ y la lleve al orgasmo.

“Pero cada uno es responsable de su satisfacción y por ello se debe hablar del tema, hasta que se den los cambios esperados”, señala la experta.

Generalmente, dice, la insatisfacción sexual en ella se debe a que permite a su pareja empezar el coito sin la estimulación previa que ella necesita.

Al iniciar así, probablemente no alcance el clímax cuando su pareja sí lo haga y termine el encuentro amoroso. “La comunicación es indispensable, para ello hace falta que se sienta confianza para tocar todos los temas que incomodan”, recalca Chávez.

Hay que conversar con serenidad, sin acusaciones, sino compartiendo las ideas para mejorar la vida sexual.

Si ha habido desaires o rechazos, el esposo deberá reconocer que hirió los sentimientos de su mujer, pedir perdón y, por supuesto, cambiar el trato.

Sobre todo, el varón debe hacer sentir a su mujer amada y deseada, que se sienta hermosa y atractiva, eso permite que se entregue con mayor confianza y posibilita una relación más ardiente.

“A veces las fantasías sexuales no se las cuenta, por vergüenza, pero al saberla la pareja puede reactivar la vida íntima y terminar la frustración”, apunta la orientadora.

El psicólogo clínico Johnny Mero Balseca comenta que la mujer debe exponer a su pareja claramente sus deseos, necesidades y expectativas.

“Hay que considerar que para avanzar en las soluciones, tomen conciencia de que quieren mejorar las cosas y que ello conllevará esfuerzo y tiempo”, explica Mero y recomienda informarnos adecuadamente para así abolir informaciones falsas, como por ejemplo, que es el hombre el responsable de brindar placer a su pareja, o que solo con la penetración se va a conseguir un orgasmo, lo cual provocan que la mujer adopte un papel pasivo en el que jamás asume la responsabilidad acerca de su propio placer.

Chávez advierte que si cada encuentro es vivido como algo decepcionante, se va a evitar la intimidad y el ambiente se va a cargar de resentimientos, que pueden expresarse con indirectas, desplantes, enojo o depresión.