Irregularidades procesales e incongruencias en la investigación de los casos Fybeca (Guayaquil 2003), Terranova (Quito 2008) y en la muerte de Damián Peña Bonilla (Cuenca 2003), en los que aparentemente estarían involucrados miembros policiales, motivaron al Ministerio del Interior a ordenar a la Unidad de Asuntos Internos de la Policía la reapertura de cada uno de esos casos.