Cientos de desempleados que se concentran en diferentes lugares de Quito y Guayaquil a la espera de alguna oportunidad de trabajo cuentan que cada día se vuelve más complicado conseguir un puesto. Según cifras del INEC, en el 2009 se perdieron 218 mil empleos formales y el subempleo (personas que tienen ingresos en cualquier labor) creció del 50,5% al 51,3%.















