En mayo pasado, Espacio Vacío, galería de arte en construcción, cumplió un año de creación, y en julio próximo se realizarán diversas actividades para celebrar este acontecimiento y las fiestas julianas.

Su propietaria es Valentina Brevi, arquitecta de 32 años, quien decidió ceder a las artes plásticas la casa ubicada en Panamá 202 y Juan Montalvo, la cual perteneció a su abuela.

“Inicialmente, hace unos cuatro años pensé en instalar mi taller de arquitectura donde está ubicada la galería, pero aún la zona era insegura y, de hecho, trataron de robar, así que desistí de la idea”, menciona.

Publicidad

Brevi añade que después de este suceso un amigo de ella, Jaime Núñez del Arco, le prestó las instalaciones para convocar a un grupo de gente y organizar la intervención urbana llamada La hora ecuatoriana, que –según sostiene– tuvo mucha acogida.

Desde ese instante, ella consideró la posibilidad de volver a la casa un espacio apto para realizar muestras o actividades periódicas vinculadas con las artes plásticas; no obstante, su idea no se concretó inmediatamente, sino hasta el año pasado, cuando otro amigo, el pintor Xavier Blum, le prestó el lugar para preparar exhibiciones del colectivo Déjame Ver, al cual él pertenece. Una de ellas se tituló Todo por un Yorch.

Brevi, quien estudió en el Cooper Union School of Architecture de Nueva York, Estados Unidos, señala que decidió llamar al lugar Espacio Vacío porque cuando le preguntaban cómo era el sitio que tenía para poner su taller, ella respondía: “Es un espacio vacío”.

Publicidad

Ella menciona que quienes deseen acceder a la galería a exponer pueden hacerlo, ya sean pintores, escultores, artistas visuales, fotógrafos, arquitectos, antropólogos, músicos, actores, bailarines o de otra vertiente artística. Quienes deseen contactarse con ella pueden escribir al correo electrónico espacio.vacio.gye@gmail.com. El uso del espacio implica no dañar las instalaciones, que están cubiertas con pintura blanca; como por ejemplo, no pintar, cortar, perforar, engomar o desmejorar de cualquier manera el piso de madera del mezzanine ni la escalera que da acceso a este. Tampoco se puede manipular o modificar las instalaciones eléctricas y sanitarias.

Cuando ya se haya asignado la fecha establecida  para el proyecto, su autor deberá iniciar unos días antes el montaje. Todos los costos de producción, instalación y desmontaje corren por cuenta del ocupante.

Publicidad

Las actividades en Espacio Vacío se desarrollan los segundos jueves de cada mes. Brevi indica que decidió fijar una sola actividad por mes, la cual se realice en solo un día, debido a que “el artista debe tener un diálogo directo con los asistentes al momento de su intervención en la galería; esta interrelación se logra solo el día de la inauguración de su exhibición y por eso las actividades duran una sola noche”.

El objetivo de la galería, explica, es expandir a otros lugares las actividades, como sucedió con las subastas y exposición que en honor a Hilda Thomas se realizaron el mes anterior en el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo.

Afirma que decidió definir como galería a Espacio Vacío porque al subir la puerta enrollable que guarda el lugar, este se amalgama con el portal de Guayaquil, que “es otra gran galería, donde hay muchas otras intervenciones de espacio”.