Mario Benedetti, uno de los escritores uruguayos más reconocidos en América Latina, falleció ayer en su hogar a los 88 años, tras una carrera literaria de seis décadas.

Benedetti había sido internado a fines de abril en una clínica por una enfermedad intestinal crónica y los galenos le dieron de alta el 6 de mayo.

“Aparentemente estaba mejorando, los médicos decían que se estaba recuperando, por eso fue medio sorpresivo el deceso”, comentó su hermano Raúl.

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Familiares y amigos comenzaron a llegar al hogar del poeta, en Montevideo, ciudad que él siempre mencionaba en sus trabajos. Según reportes de medios locales, Benedetti falleció de  insuficiencia renal.

Se desempeñó como periodista, empleado público y vendedor.  En el 2008 fue internado varias veces por problemas intestinales y respiratorios.

Tras morir su esposa Luz, en el 2006, con la que  estuvo casado 60 años, la salud del poeta  comenzó a deteriorarse.

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Varios de sus poemas, escritos en la dictadura y en años recientes, los dedicó a víctimas de la represión militar. Entre sus obras constan  Letras del continente mestizo, Inventario 70, El escritor latinoamericano y la revolución posible y  Con y sin nostalgia, Poemas de la oficina, La tregua, su última obra, el poemario  Testigo de uno mismo.

Los restos de Benedetti, que ganó en 1999 el premio Reina Sofía de Poesía y en el 2005 el Menéndez Pelayo, serán velados hoy durante todo el día en el Palacio Legislativo.