Con clases, talleres y demostraciones, quiteña exhibe arte, música y más folclor de su país.
Por su estatura (1,80 m) y la blancura de su piel, la ecuatoriana Sandra Navarrete, de 28 años, podría pasar como nativa de Bélgica, país europeo donde reside desde enero del 2005 con su marido holandés, Ramón de Vries, y sus dos hijas.















