Resentimiento social: “la clase media es la que divide entre ‘los de arriba’ y ‘los de abajo’, según la cantidad de dinero que reciban o cobren”. Una buena cantidad de funcionarios de este Gobierno pertenecen a la clase media y sus ingresos son muy superiores al de un obrero de fábrica. ¿Debemos ubicarlos entre “los de arriba”.
Manipulación: “Yo trabajo, tú trabajas… ellos cobran”. El complejo problema del empleo, los salarios y la utilidad se ve reducido a un eslogan publicitario.
Las autoridades responsables deberían recordar que la Constitución actual y la nueva que se propone condenan estas prácticas.