Intervienen en esta cita,  ideada y dirigida por el maestro Enrique Gil Calderón, coros de España, Venezuela, Perú, México y Ecuador.

Luego se seis días de intensa actividad, el XXX Festival Internacional de Coros ‘El Canto coral Hermana a los Pueblos’ llega a su fin esta noche, en el Teatro Centro de Arte, con la presentación de todas las agrupaciones  que han intervenido en esta cita fraterna.

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Cada uno de los coros interpreta dos canciones. Pero antes, interviene, con   concierto completo, el Coro de la Universidad de Guayaquil, que comanda  el maestro Enrique Gil Calderón, el gestor de este  festival, que en esta edición arribó a su trigésimo aniversario. 
 
El encuentro  se inició el pasado lunes   con la intervención del  Coro de la Politécnica Salesiana, dirigido por Jorge Layana; el coro de la Universidad CEU-San Pablo, de Madrid, a cargo de José María Álvarez; y el Coro de Niños de la Universidad de Guayaquil, bajo la batuta de Francisco Aguilera.

Todo ello, luego de una breve  pero  emotiva intervención del fundador del festival,  durante el discurso de bienvenida, que provocó una ovación por parte de los asistentes.

El  martes cantó el Coro Univesitario de la UCV, de Maracay, Venezuela, dirigido por César Liendo, que demostró gran confianza y comunicación con el público.

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La sorpresa de la noche, el pasillo Despedida, causó también sorpresa al director, ya que una vez comenzada la canción, tuvo que detenerla, ofrecer disculpas por la falla “técnica” y reiniciarla, pues los coralistas entraron en mal tono. Sin embargo, durante el receso se escucharon muy buenos comentarios respecto a este grupo.

En la segunda parte de la jornada del martes  y ante un teatro  con menos público, se presentó el coro guayaquileño Ars Nova, dirigido por Mónica Alvarado, que interpretó temas populares como Bésame mucho, Piel canela, El bodeguero, Todos vuelven y algunos otros.

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El coro de Madrigalistas de la Universidad Católica de Perú, bajo la dirección de Antonio Paz, tuvo una  relevante participación el miércoles,  con un sonido   bien definido y gran expresividad. El público aplaudió  efusivamente canciones como Piedra negra sobre una piedra blanca; Las Cumbres, del compositor peruano Enrique Iturriaga, y La muerte de un ángel, del argentino Astor Piazzola.

Una vez terminado el programa, los aplausos del público los regresaron a entregar una última canción, oportunidad que aprovechó el coro para homenajear a los espectadores ecuatorianos con el pasillo Romance de mi destino.

En la segunda parte del programa del   miércoles cantó el Coro de la Casa de Cultura, núcleo del Guayas, dirigido por Juan Carlos Urrutia, que celebraba su décima participación en el festival. Aprovechó para agradecerle a Kily (Enrique Gil) por su amistad y cariño durante esta década y le dedicó este concierto.

El  jueves se presentó la Coral  Vinicio Adames  de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de los Andes, Mérida, Venezuela, dirigida por Juan Eliezer Arrieche y en representación local estuvo el coro del Centro Ecuatoriano Norteamericano (CEN), con la dirección de  Fernando Gil.

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Anoche tenían previsto cantar el Coro Normalista de Puebla, México,  y  el Coro de Pichincha. 
 
BREVES
La última jornada del Festival Internacional de Coros es a las 20:00, en el Teatro Centro de Arte de la Sociedad Femenina de Cultura (kilómetro 4,5 vía a Daule).

COSTOS
La entrada al concierto cuesta 5 dólares. En las anteriores noches, el costo era de 3 dólares.