La justicia española abrió este lunes una investigación sobre un acto en el cual tres encapuchados que dijeron pertenecer a ETA señalaron el rechazo de la organización a abandonar las armas sin obtener  antes la independencia del País Vasco, pese a haber anunciado seis meses atrás un "cese al fuego permanente".
  
El juez Baltasar Garzón, de la Audiencia Nacional (principal instancia  penal española), pidió a la Policía que investigue las circunstancias en que tuvo lugar el acto, ocurrido en la tarde del sábado en un bosque de la localidad de Oiartzun (País Vasco, norte), informaron fuentes judiciales.
  
Durante su intervención, los tres presuntos miembros de la organización independentista armada vasca, armados con subfusiles y vestidos de negro, proclamaron la voluntad "de seguir luchando firmemente, con las armas en la mano, hasta conseguir la independencia y el socialismo del País Vasco".
  
Leyeron su comunicado ante 1.500 personas reunidas en homenaje a los soldados vascos "caídos en todas las confrontaciones del pasado y del presente".
  
Al acabar su alocución dispararon siete tiros al aire, justo cuando se  cumplían seis meses desde la entrada en vigor de un alto el fuego permanente de ETA.
  
Esta intervención provocó un rechazo general en España, donde el aparente bloqueo del proceso de paz lanzado oficialmente el 29 de junio por el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, suscita una creciente preocupación.
  
"La democracia es incompatible con la violencia, como lo es el diálogo con el chantaje", dijo este lunes el ministro del Interior español, Alfredo  Rubalcaba.
  
Advirtió a la izquierda independentista vasca que el gobierno socialista no modificará su postura respecto al proceso de paz. "Las reglas están claras: ausencia de violencia y cumplimiento de las leyes", afirmó.
  
Por su parte, el secretario general del Partido Popular (PP, derecha) y antiguo ministro del Interior de José María Aznar, Angel Acebes, criticó al Gobierno por su "debilidad ante ETA".
  
Zapatero "debe decir ya" que "no se va a legalizar Batasuna (brazo político de ETA), que no se va a constituir mesa alguna de partidos, ordenar a la Fiscalía y a la policía que recupere la capacidad de acción que tenía y que no va a haber más negociación ni más compromisos con ETA", añadió Acebes.
  
Sin referirse directamente al comunicado de ETA, Zapatero había afirmado el domingo que "el Gobierno seguirá trabajando con firmeza para el fin de la violencia y la gran aspiración de paz de los ciudadanos vascos y españoles".