La jornada del jueves en el Abierto de tenis de Estados Unidos reserva dos partidos llenos de interrogantes, cuando se midan por el pase a semifinales el suizo Roger Federer con el argentino David Nalbandián, y el australiano Lleyton Hewitt ante el finlandés Jarkko Nieminen.
El cuarteto ha prevalecido sobre sus rivales gracias a un rendimiento homogéneo en todos los aspectos del juego y un sentido de recuperación que les ha permitido salvar momentos difíciles.
Sin dudas que el enfrentamiento más caliente será el del Expreso suizo contra el Tren cordobés.
Federer, número uno mundial y del Abierto neoyorquino, va camino de revalidar su título del pasado año y de la 33 victoria consecutiva sobre pistas rápidas, una menos que el récord establecido por el legendario Peter Sampras de 1996 a 1997.
El suizo, de 24 años, ha perdido un sólo set en cuatro partidos. La única manga que cedió fue ante el alemán Nicolas Kiefer, a quien superó en cuatro cuadros la noche del martes.
Antes de ese encuentro Federer sólo había perdido un set -coincidentemente ante Kiefer en Wimbledon- en sus últimos 10 encuentros de Grand Slam.
Nalbandián (N.11) estuvo igualmente contundente en sus cuatro salidas a las canchas de Flushing Meadows, cediéndo nada más que dos parciales.
Nacido hace 23 años en la localidad de Unquillo, provincia de Córdoba (región central de Argentina), Nalbandián asegura conocer las claves para derrotar a Federer.
"Creo que nadie es invencible. Cualquiera le puede ganar a cualquiera siempre y cuando utilice una táctica correcta. Muchas veces veo que no le hacen lo que a él le molesta y lo dejan hacer su juego. Conmigo no será así", indicó el argentino.
En siete enfrentamientos en el circuito ATP Nalbandián lleva ventaja de 5-2, pero Federer se ha impuesto en los últimos dos encuentros, el último de ellos en el Abierto de Australia de 2004, con resultado de 7-5, 6-4, 5-7, 6-3.
"Nos conocemos mucho desde chicos, creo que él mejoró muchisimo, por algo es el número uno del mundo y se mantiene allá arriba. No obstante, creo que cuando te conocen mucho no existe ranking ni historia, ni nada", acotó Nalbandián.
De su lado, Federer opina que "el partido contra Nalbandián será muy disputado. El me ganó varias veces en los juniors. ¿Cuántas? No sé, pero esa época quedó atrás".
Otro duelo igualmente expectante será el de Hewitt (N.3) contra Nieminen (57 ATP), donde el australiano no podrá confiarse en que su ubicación actual en el escalafón le garantizará el triunfo.
Hewitt ha tenido altas y bajas en este torneo, a veces jugando como un maestro, otras como un aprendiz.
Tuvo dos partidos difíciles seguidos (segunda y tercera rondas) contra el argentino José Acasuso y el estadounidense TaylorDent, jugadores0de estilos parecidos al del finlandés, con saques potentes y amante del juego en la red.
Empero, despuésse deshizo sin esfuerzo del eslovaco Dominik Hrbaty (N.17), encuentro donde cometió solamente 15 errores no forzados.
"Mi juego está en su punto perfecto, mi confianza sigue creciendo y creo que voy camino de mi segundo título del Abierto", expresó el tenista de Adelaide, campeón de Flushing Meadows en el 2001.
Hewitt, de 24 años, ha llegado este año hasta semifinales del Abierto de Australia y Wimbledon.