El fiscal de la Unidad de Delitos contra el medio ambiente y patrimonio cultural, Luis Enríquez Villacrés, inició una instrucción fiscal y solicitó la orden de prisión preventiva en contra de Patricio Izurieta Mora Bowen, por presunción de comerciar ilegalmente variedades de flores.

En su instrucción, el fiscal acusa a Izurieta, hermano del ministro de Trabajo, Raúl Izurieta Mora Bowen, del presunto delito de almacenar, utilizar con fines comerciales, ofertar, vender, importar o exportar una obtención vegetal registrada en el país (variedad de flores), así como su material de reproducción, propagación o multiplicación.

Según Patricio Izurieta, existe mala fe e intención de causar daño con la denuncia, en virtud de que no hay nada de malo en el tema, pues se trata de un fideicomiso que se maneja a modo de un contrato de seguridad mercantil.

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“La patente (que permite comercializar la planta) nada tiene que ver con el fideicomiso”, dijo.

Y es que el fiscal, en su instrucción, determinó que existía la prohibición de comercializar determinadas variedades vegetales, cuya orden provino del director nacional de Obtenciones Vegetales del Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual, en contra de la compañía Agrícola y Forestal Monterrey Montrey.

No obstante, y a pesar de esa medida, según el fiscal, se continúa comercializando y explotando las variedades de flores y, más aún, se ha transferido el dominio del material vegetal al título de fideicomiso mercantil, denominado Fideicomiso Mercantil Monterrey, manejado por la firma Standford Trust Company Administradora de Fondos y Fideicomisos.

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La denuncia fue presentada por Antonio de la Puente de la Puente, en su calidad de gerente general y representante legal de Ecuador Roses, la que representa los derechos de propiedad intelectual de las variedades vegetales: Ruigrog, Ruiliro, Ruikoowi, Pannaran y Ruitenor.

Tras asegurar que aún no ha sido notificado con la instrucción fiscal, Izurieta explicó que los derechos a regalías son reales. Por ello, indicó, Ecuador Roses se siente perjudicada y reclaman un pago, lo cual quiere decir que se trata un caso mercantil y no penal.

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El fideicomiso, cuya constitución fue legal, afirmó, no está explotando esas variedades de flores, pues la empresa que lo maneja está paralizada por algunos meses.