El centro comercial Policentro (avenidas Carlos Luis Plaza Dañín y San Jorge) celebró ayer sus 25 años de servicio con un evento en el que recibió condecoraciones de parte de la Municipalidad y de la Cámara de Comercio.

Todo el lugar refleja modernidad: limpio, adornado con fuentes y plantas en sus pasillos.

El Policentro es visitado por muchas personas cada día, que como Rubén Medina y su esposa disfrutan de la comodidad y del servicio de cafeterías que les ofrece.

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Ellos al igual que Franklin Escalante aprecian la amplitud, el buen ambiente y seguridad del primer centro comercial que abrió sus puertas en Guayaquil y fue inaugurado el 25 de julio de 1979. Escalante explicó que aunque no  vive cerca del barrio acude especialmente porque le parece muy agradable.

La construcción de dos plantas propone una oferta completa de comida, ropa, electrodomésticos, diversión  y hasta servicio de correo entre otros productos.

En la cafetería El Dólar, Adalberto Carrasco de 35 años y quien trabaja desde hace trece en ella, comentó que los clientes siempre regresan al Policentro por el trato amable y respetuoso que reciben.

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En cambio, para Leonor de Olmedo, propietaria de  la librería Nueva Selecciones, su hermana Rommy Cepeda y su madre María Leonor de Cepeda, la gente siempre visita el Policentro atraída, sin saberlo, por la pirámide de cristal ubicada sobre la fuente central del establecimiento.

Esta proporciona, según ellas, buena energía y ayuda a las plantas naturales que decoran el lugar. Eso agregado al amor con que se trata a los visitantes y la tradición de ser los primeros repercute en el éxito de todo el centro comercial.