“Buscamos algo que económicamente fuera mejor para Barcelona”, fue la frase que usó Leonardo Bohrer, presidente del club torero, para definir el cambio y mantuvo en reserva el monto de la negociación. De igual forma, procedió Héctor Devia, el presidente de la empresa auspiciante; sin embargo, extraoficialmente se conoció que -por este año- el contrato se firmó por 800.000 dólares.