Los precios del petróleo subieron este lunes al nivel máximo de los últimos dos meses, con un repunte de casi 6% del crudo estadounidense que lo llevó a más de 30 dólares el barril, mientras el paro general en Venezuela entraba en su tercera semana y seguía perturbando las exportaciones del país.
 
La prolongada protesta, que apunta a la renuncia del presidente venezolano Hugo Chávez, se sumó a los temores de que la oferta de crudo resulte afectada por una posible guerra liderada por Estados Unidos contra Iraq.
 
Los futuros del crudo ligero Nymex, referencial para Estados Unidos, ganaron 1,66 dólares, a 30,1 dólares por barril, un alza de 5,8%.
 
El futuro para entrega en enero del crudo Brent, referencial para Europa, cerró con una subida de 1,17 dólares, a 28,38 dólares por barril, un avance del 4,3%.
 
Los operadores dijeron que la inesperadamente larga huelga en Venezuela, quinto exportador mundial, que suministra cerca del 14% de las importaciones de petróleo de Estados Unidos, pronto comenzaría a reducir los inventarios en ese país, el mayor consumidor del mundo.
 
"La pérdida de importaciones de crudo pesado en el mercado estadounidense ahora se está volviendo considerable", dijo Paul Horsnell de J.P.Morgan en su más reciente informe.
 
El costo del crudo ha subido en un 20% en el último mes debido al paro en Venezuela y a la amenaza de un ataque de Estados Unidos a Iraq.
 
Los militares venezolanos abordaron el domingo a la fuerza un buque petrolero, en un intento por romper un paro general contra el presidente Hugo Chávez, quien ha reiterado que no renunciará a pesar del paro ni convocará elecciones anticipadas pese a la presión.
 
 El gobierno advirtió que la acción podría repetirse con otros buques, de unos 40 que se encuentran fondeados en aguas venezolanas desde hace una semana y que han paralizado los despachos del quinto exportador mundial de crudos.
 
Chávez sigue esforzándose por recuperar el control de las actividades de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), que comenzó a importar gasolina para evitar una escasez doméstica y declaró un estado de "fuerza mayor" con sus clientes internacionales por la paralización de las exportaciones.    La huelga ha reducido la producción de petróleo de Venezuela a menos de una tercera parte de su nivel normal, de 3,1 millones de barriles por día.   
 
La semana pasada, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó recortar su oferta de crudo y, al mismo tiempo, restaurar la confianza del mercado en su sistema de cuotas de producción elevando sus limites oficiales.
 
Los ministros de los países de la OPEP dijeron que apuntan a un recorte de 1,7 millones de barriles por día en la producción, o un 7%, a partir del próximo mes.
 
Con respecto a Iraq, los operadores del mercado de petróleo dijeron que el abastecimiento de crudo proveniente de este país podría resultar amenazado por la creciente tensión con Estados Unidos debido a las inspecciones de armas que realiza la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
 
El lunes, la Casa Blanca dijo que Iraq no tendrá una segunda oportunidad para corregir omisiones en su declaración de armas ante la ONU.