El ex diputado socialcristiano Franklin Verduga, y el ex oficial de la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG), Vicente Matamoros, fueron sentenciados ayer a cuatro años de prisión por el presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Armando Bermeo, en el caso Garita 3.

El delito del que se les acusa es el de concusión, es decir de haber recibido o cobrado valores indebidos (contribuciones, rentas, gratificaciones) a los transportistas y usuarios de la terminal terrestre de Guayaquil.

Si hasta hoy la CSJ no dictaba la sentencia definitiva, este caso hubiese prescrito.
Por su parte, Verduga calificó como fuera de lugar la sentencia, ya que para ejecutoriarla deben pasar tres días desde que fue presentada. “Esto sería el martes y para esa fecha la causa ya estará prescrita”, agregó.

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Dijo que la sentencia se dictó para darle gusto “a la galería de sus poderosos enemigos” y que para mañana su abogado presentará la apelación en la Primera Sala de CSJ.

Multas
Bermeo estableció contra Verduga y Matamoros el pago de una multa equivalente al valor de un salario mínimo vital y la restitución del cuádruple de lo que hubieren percibido (valor que determinarán los peritos).

El cobro de coimas a transportistas y usuarios de la terminal terrestre fue denunciado en 1997. Los recursos eran repartidos entre directivos, oficiales y miembros de la tropa de la CTG, según la providencia emitida por la Primera Sala de lo Penal de la CSJ, el pasado 13 de noviembre.
En el proceso se involucró al ex oficial Líder Intriago y al ex director ejecutivo de la CTG, Enrique Pine León.