De las 11 victorias que ahora lucen en su palmarés, casi el 20 % de las mismas (dos) tuvieron lugar en el Giro de Italia. Pero la última de todas ellas, conseguida este sábado en el trepidante inicio de la Corsa Rosa, sin duda es la más especial de todas ellas para Jhonatan Narváez (27 años, Playón de San Francisco). Y es que el ecuatoriano no sólo disfrutó del privilegio de vencer a Tadej Pogacar, sino también de vestirse por primera vez en su carrera deportiva con la maglia rosa.

“Es una gran sensación. Habíamos planeado esto con el equipo, pero tuve que seguir a Pogacar y todavía me duelen las piernas. Fue muy duro, pero al final lo logré”, explicó Narváez al término de la etapa, después de resistir la embestida de Pogacar en el muro de San Vito para después rematar en el esprint a tres bandas junto al esloveno y Maximilian Schachmann: “En el esprint, creo que se fue desde demasiado lejos. Es increíble. No tenemos muchas oportunidades en una gran vuelta para ganar una etapa. Y especialmente esta me sitúa en la maglia rosa. Ha sido muy difícil conseguirla”.

Jhonatan Narváez se impone a Tadej Pogacar y es el primer líder del Giro de Italia 2024

Parece difícil que aguante un día más Narváez su posición de privilegio con el exigente final en Oropa que nos aguarda en la segunda etapa, ya que el del Ineos es un corredor mucho más competitivo en subidas cortas y explosivas como la de hoy.

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Pase lo que pase, ya ha dejado huella en la historia de la carrera para Ecuador, puesto que un ecuatoriano no lideraba el Giro desde Richard Carapaz en 2022, ni ganaba una etapa desde el carchense en 2019. Adiós a la sequía.

Pogacar: ‘Sabía que Narváez era difícil de vencer’

En la otra cara de la moneda estuvo Pogacar, que puso a trabajar a toda la maquinaria del UAE pensando en el liderato, aunque no logró rematar. “Primer día en el Giro. Fue una etapa corta y rápida. Intentamos controlar la etapa, pero desafortunadamente no era nuestro día, pero aun así hicimos un buen trabajo. Vimos que algunos corredores sufrieron hoy y otros se sienten bien. Por eso creo que también en nuestro equipo vamos paso a paso, día a día”, analizó Pogacar tras completar la primera etapa de su carrera en la ronda italiana.

No obstante, apunta al final de este domingo en Oropa con optimismo: “Mañana, la etapa es más adecuada para nosotros, diría yo, y mañana veremos cómo están las piernas a partir de hoy. Pero creo que será un muy buen Giro. Fue un comienzo muy bonito aquí en Turín, con mucha gente. En la última subida, desafortunadamente, tuve que ir a tope desde abajo hasta la cima, pero Narváez estuvo superfuerte hoy y siguió muy bien la rueda, y también el grupo de adelante tenía una brecha demasiado grande. Lo intenté, lo di todo, pero sí, cuando llegamos a la cima supe que Narváez era difícil de vencer en el esprint y luego también estaba un poco nervioso. Hacía mucho tiempo que no corría con los tres muchachos y comencé demasiado temprano el esprint, pero todavía tenía buenas piernas. Narváez obviamente es un corredor más rápido que yo, así que no tenía muchas posibilidades”. Oropa, seguramente, será otro cantar…(D)