La cantidad de comida que ‘aparece’ en Navidad es un deleite al paladar, pero los excesos lo sufre el cuerpo, ya que una persona promedio puede, sin saberlo, consumir hasta 5.300 calorías en la cena del 25 de diciembre, de acuerdo a una encuesta realizada por la empresa inglesa de nutrición ‘Forza Supplements’.

Pues lo difícil llegará después, cuando se tengan que quemar todas esas calorías que se ingirieron, y de acuerdo al estudio, no será nada fácil.

Los autores de la muestra sostienen que quienes consumieron dichas cantidades de comida tendrían que correr el equivalente a dos maratones (52 millas); si es en bicicleta deberían pedalear 109 millas; en tanto que si de nadar se trata, tendrían que pasar 13 horas en la piscina; y si es en un gimansio deberían pasar nada más y nada menos que nueve horas, si queman 590 calorías por cada una. (F)