Por Sergio Pérez

“Muy elegantemente ataviada, ligeramente agripada, Silvia Flores hizo un repaso a baladas famosas de los años ochenta acompañada del tecladista José Granda, sin duda el mejor acompañante de esta eximia cantante y un músico realmente excepcional.

Y así, en el Wine Bar de Plaza Lagos, con gran cantidad de público en este emblemático restaurante, Silvia y José abrieron con Ahí me colé, de Mecano, orquestado por José con el hermoso timbre de Silvia y sin vibrato alguno.

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Cruz de navajas también de Mecano a continuación que menciona a “los drogadictos” destacó el desarrollo de José en teclados y la voz jovencita de Silvia, que destaca en el Bankers Club de Guayaquil.

Fallin, de Alicia Keys, cantada en un inglés bien pronunciado, dramáticamente lenta y con letra romántica exhibió gritos y piruetas vocales en esta versión llamativa de la cantante.

Diamonds, de Rihanna, confirmó el estilo elegante de José Granda en teclados y la belleza lírica que habla de que “somos como diamantes en el firmamento”.

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Your Love, pop-rock melódico del grupo The Outfield en modalidad romántica que dice “no quiero perder tu amor esta noche”, precedió a una Silvia Flores rockera cantando Mother Love, de David Bowie, con el mejor acompañamiento rítmico y melódico de un José Granda realmente impecable orquestando.

Vibrando al máximo, Silvia cantó en un tempo más lento y contemplativo Frozen Heart, de Madonna, que habla de las vicisitudes del corazón, con el acompañamiento y orquestación exacta del tecladista.

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The Promise y A Little Respect, de Eraser, fueron cantadas como un medley y Stand By Me de los años cincuenta, la canción con la que Silvia clasificó para concursar en La voz fue interpretada en estilo soul que le va de maravilla a esta cantante que cada día confirma su excelente voz.

Finalmente, Silvia interpretó el folk clásico del gigante negro Ray Charles llamado Hit the road Jack y como contraste, Ay, qué pesado, un pop liviano y optimista de Mecano. (O)