La salud física generalmente preocupa más que la salud emocional, cuando ambas son importantes, advierte Raquel Rodríguez-Gendry, líder de la Fundación de Narices Rojas, quien hace más de un año se casó con el creador del método de bienestar y alegría, Sebastián Gendry, pero se vinculó al sistema antes de conocerlo.

Se trata de un aprendizaje de cada situación, de una enfermedad, una muerte, de maltrato físico o psicológico, “debes aprender que si permites que las cosas de afuera te afecten, nunca vas a ser feliz”.

En su teoría reconoce que ante una muerte, por ejemplo, hay que desahogarse, llorar, pero luego seguir adelante porque si no terminará enfermándose. “Si sueñas con tener una casa para ser feliz quiere decir que hasta que no la tengas no serás feliz, ¡qué pena!”, señala.

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El método invita a tomar conciencia en la risa, en que se puede ser feliz en el lugar que esté y en cada momento, dice.

Qué ocurre cuando le responden ‘usted puede hablar porque soy yo quien está sufriendo tal enfermedad o tal situación’. “Yo tengo una enfermedad crónica degenerativa (miastenia gravis), entonces yo debería estar ¡oh, Dios mío! con la tristeza a flor de piel, pero tomo tres pastillas de por vida y son caras y a veces no tengo para comprarlas”, refiere a manera de ejemplo para insistir en que hay que cambiar de sintonía del drama a la alegría, como promueven los payasos hospitalarios de los que es parte.

El método de bienestar toma lo más potente de la risoterapia, de la programación neurolingüística, de la psicología positiva, de la yoga de la risa y las complementa de tal forma que logra que el ser humano salga adelante, explica.

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Añade que todos tenemos las herramientas y que en internet o libros se puede buscar ayuda, además de los profesionales. En los talleres lo que se hace es mostrar cómo reprogramarse día a día. Ella ofrece desde mañana el taller ‘Brigadas de payasos humanitarios’, a las 18:00, en Circunvalación Sur 312 y Todos los Santos. Informes al 099-782-7338. (I)