El prioste o capitán de las octavas de Mocha, Jorge Paspuel, y su familia lideraron la tarde del jueves el desfile en la víspera en homenaje al patrono del cantón: Juan Bautista.

Al grito de “por san Juanito, por Mocha y por las octavas” comenzó el desfile, en el que estuvieron disfrazados con trajes típicos, como vaqueros, curiquingues, carishinas (hombres vestidos de mujeres), aradores con sus yuntas, capariche (barrendero), vacas locas, portadores de ceras y flores. Y hubo espacio para los voladores.

Las bandas de pueblo de San Andrés de Chimborazo, K-leña de Cotopaxi y San Miguel de Tisaleo pusieron el toque de alegría. A Carlos Chicaiza se le impuso la banda de capitán 2017. Él se comprometió a fortalecer las fiestas en honor al patrono de los mochanos.

Publicidad

El ingreso de los disfrazados es una forma de demostrar agradecimiento a Juan Bautista por sus milagros y por interceder para que se den buenas cosechas en el campo, contó Paspuel, el prioste de este año.

“Mis abuelitos conversan de que este desfile era una tradición en Mocha, y por esa razón ahora (desde hace 4 años) lo estamos rescatando”, agregó.

Wilson Carranza, alcalde de Mocha, dijo que tratan de difundir esta tradición a niños y jóvenes. Por ello, añadió, van a realizar gestiones para que sea reconocido como patrimonio cultural intangible.

Publicidad

Enrique Caluña, presidente del Comité de Fiestas, aseguró que todos en Mocha se unieron para rescatar la cultura tradicional, como los disfrazados que dan alegría al festejo.

El desfile terminó con la repartición del cariucho, un plato ancestral con habas, ocas, mellocos y papas, que hace unos 30 años era parte de la dieta casi diaria de los pobladores de Mocha, según Narcisa Caluña.

Publicidad

Ayer se dieron los festejos mayores por san Juan. (F)