Nuestras dietas están tan distorsionadas que hoy, al ver la etiqueta de los productos nos enfocamos más en lo que no contienen que en los nutrientes que aportan.

La comida rápida nos ha invadido, nos ha saturado de grasa y tiene cada vez más comensales. Ante este fenómeno surge el slow food (comida lenta) que, según la directora ejecutiva de Premios Latinoamérica Verde, Bianca Dáger, más que una tendencia es una necesidad.

“Se trata de adoptar una alimentación menos procesada. Es necesario cuestionarnos no solo el precio de la comida sino de qué está hecha y de dónde proviene”, dijo durante un conversatorio que convocó a reconocidos chefs del país y gente ligada a la producción agrícola, para generar un espacio de reflexión sobre una alimentación consciente.

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Juan José Morán, chef del restaurante La Pizarra habló de formas creativas de reciclar la comida como lograr unos crocantes chicharrones con la piel de los pescados que muchas veces se desecha, así como elaborar delicados vinagres con las frutas que se fermentan en casa con el paso del tiempo.

La nutricionista holística Andrea Tinoco, que participó en la cita, mencionó que slow food es un movimiento que nace en Italia para hacer contra al gran crecimiento de la comida rápida ligada al capitalismo, a bajos sueldos y la destrucción del ambiente. El tema tendrá un espacio en la quinta edición de Premios Latinoamérica Verde del 14 al 16 de agosto. (F)

La exhibición

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El evento socio ambiental más grande de la región, Premios Latinoamérica Verde se desarrollará del 14 al 16 de agosto en el malecón de Puerto Santa Ana. Podrás apreciar los 500 mejores proyectos ambientales en exhibición, de 11h00 a 20h00. Este año se inscribieron 2.733 proyectos sostenibles desde 38 países.