Tal vez nadie se atreva a predecir las formas que tomará la corrupción y su impacto en nuestro país si la mayor parte de los ecuatorianos –que resulta siendo víctima– no actúa con determinación para exigir que se le ponga coto a tantas manifestaciones de ese accionar que mina el bienestar común y hasta la paz ciudadana.

Que avancen las prácticas corruptas, a veces revestidas de aparente legalidad porque presuntos empresarios obtienen contratos públicos que supuestamente ganan, no solo se debe a que hay colusión con funcionarios de igual ralea, sino porque también recurren a la intimidación para procurarse cooperación. Este Diario conoció que en la Fiscalía hay cuatro denuncias por amenazas en torno a contratos de limpieza en el hospital Teodoro Maldonado Carbo del IESS.

Los denunciantes han recibido agresiones, atentados, envío de fotos como evidencia de que los siguen y mensajes coercitivos para que, desde su instancia laboral, accedan al pago de facturas correspondientes al servicio de limpieza y desinfección de áreas del referido hospital. Desde el año 2020 cuatro asociaciones que han dado el servicio de limpieza al hospital del IESS ubicado en el sur de Guayaquil han recibido diversos tipos de quejas.

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Afectaciones por falta de mantenimiento en el hospital Teodoro Maldonado Carbo, del IESS

El matrimonio detrás de los contratos de la limpieza en el hospital Teodoro Maldonado Carbo

Una organización con fines altamente lucrativos, que hace uso de prácticas corruptoras y de la violencia para obtener complicidad u obediencia de quienes se cruzan en su accionar, con perjuicio para la institución en la que penetra, una vez identificada debiera ser investigada y procesada con prioridad y rigor. Desde la aplicación de inteligencia policial para develar argollas interinstitucionales hasta fiscales y jueces específicos se tornan imprescindibles para acelerar resultados confiables, pues mientras los asociados lavan impunes sus dineros mal habidos y cuentan con apoyos políticos, las víctimas quedan a la espera de que la denuncia surta efecto.

El IESS debería ser la institución en la que se aplique un sistema piloto de erradicación de la corrupción a todo nivel, visibilizando sus resultados. (O)