Lentamente se van incorporando los progresos informáticos al sector agropecuario, es que como ningún otro abarca múltiples parámetros y actividades sujetos a ligarse al uso de computadoras y otros recursos telemáticos. La utilización de las TIC –tecnologías de la información y comunicación– está transformando radicalmente el trabajo del personal dedicado a las labores campesinas, combinando espléndidamente aspectos técnicos y prácticos, mejorando eficacia y eficiencia de acciones que antes se ejecutaban manualmente.

La irrupción vigorosa de las TIC data de la década de los 80, siendo los protagonistas los países industrializados de más avance y poderío, sin que sea su patrimonio exclusivo pues las sociedades de menor desarrollo están dando pasos significativos en la línea de la masificación informática del agro, no siendo una novedad acudir a las redes donde se obtienen con mucha facilidad y bajo costo datos orientadores de resultados experimentales de los más caracterizados centros de estudios, siendo suficiente disponer de un enlace electrónico de libre y gratuito empleo o a un costo imperceptible.

Ya no es necesario acudir a grandes bibliotecas ni solicitar versiones fotográficas de textos, todo se encuentra en almacenamientos de capacidad incalculable, incorporables en pequeñas estructuras como discos, tarjetas, redes, fácilmente transportables, siendo el mejor ejemplo la red de redes o internet (INTERconectedNETwork) que invadió los ámbitos sociales como una herramienta poderosa de sapiencia y promoción de publicaciones. Como era de esperarse, la agricultura no podía quedarse a la zaga de su aplicación, por más sofisticada que en apariencia sea, puede vincularse con los suelos agrícolas, el clima, la supervisión de tareas, las predicciones de cosechas, diagnósticos de plagas, enfermedades y su efectivo control, déficits hídricos... La transformación digital del agro no es una opción sino una necesidad por la sostenibilidad.

En lo dicho se inscribe el avance creciente de Agrosoft, empresa que ofrece en Latinoamérica y el Caribe programas informáticos para agroexportadoras, destacándose el banano en un trabajo constante de 25 años, liderando con amplia aceptación la innovación, difundiendo la cobertura informática en los estratos productivos, agilizando la toma de decisiones en tiempo real, con reportes oportunos y analíticos, contribuyendo al aumento de rendimientos y disminución de costos, elementos fundamentales en periodos de crisis.

Varias empresas han automatizado faenas antes tediosas e inexactas, como la pesada de racimos y cajas, cálculo de rechazos, optimizando el cumplimiento de informes gubernamentales, facilitando la certificación de productos a exportarse, generando un cúmulo de guarismos que se conservan en nube, término que describe un espacio de internet al que se acude desde cualquier lugar, sujeto a compartirse con usuarios autorizados.

Destacamos la tenacidad del ingeniero Xavier Cárdenas, principal de Agrosoft, gestor de accesibles estructuras susceptibles de ser implantadas en fincas pequeñas que configuran la mayoría de plantaciones bananeras del Ecuador. (O)