En el discurso que pronunció el 19 de noviembre de 1863, en el lugar donde se produjo la batalla de Gettysburg, Abraham Lincoln definió la democracia como “el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”, siendo el mejor sistema para la lucha por la igualdad de todos los hombres ante la ley, sin discriminación de ningún tipo.

Esta frase y ejemplo inspirador me viene a la mente ahora que estamos a días, una vez más, de ejercer nuestro poder como ciudadanos en las elecciones del 5 de febrero del 2023. Bien decía el presidente Barack Obama, que el cargo más importante en una democracia es el de ‘ciudadano’ por cuanto todo empieza y termina en ellos.

En esta elección tendremos en nuestras manos la elección de autoridades seccionales, preguntas de enmiendas constitucionales y elección de miembros del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), todos temas esenciales.

Sobre las enmiendas a la Constitución que serán consultadas está la pregunta de la extradición, que es una herramienta fundamental de cooperación entre países para la lucha contra los delitos transnacionales, como el narcotráfico y el lavado de activos; sí, no todo se soluciona con esto, pero nadie puede negar que es una herramienta magnífica para la situación crítica que tenemos en materia de seguridad, y tendrá un efecto rápido ya que hasta que se apruebe la ley será el ministro de Relaciones Exteriores quien emitirá acuerdos con normas temporales para aplicarla. Otra de las preguntas en materia de seguridad es la del Consejo Fiscal, que busca dotar de autonomía a esa entidad y a su máxima autoridad.

Sobre las preguntas políticas, la más importante es el traslado de las competencias de designación del CPCCS a favor de la Asamblea Nacional, con procesos de selección con una hoja de ruta clara y precisa en los tiempos, con pautas de los méritos que deben cumplir y con soluciones precisas en caso de que no lleguen a designarse por bloqueos políticos, de tal forma de poner fin a la crisis institucional actual. A esto se suman las preguntas del sinceramiento del número de afiliados a partidos políticos, la reducción del número de asambleístas y la modificación del proceso de designación de los miembros del CPCCS. Todo mi respaldo a dichas propuestas y me sumo también a las dos preguntas ambientales para fomentar la conservación de nuestro hábitat.

También ejerceremos nuestro poder para elegir a las autoridades más cercanas a nosotros, a nuestra vida diaria; me refiero a los concejales, alcaldes y prefectos, que ejercen sus funciones a través de los gobiernos seccionales autónomos. Especialmente en el caso de los alcaldes, como en muchas de las importantes decisiones se requiere de la aprobación del Concejo Cantonal, es muy importante acompañar con el voto a las listas de concejales que acompañen al candidato, pues no queremos que el bloqueo institucional que ocurre entre la Asamblea y el Gobierno ocurra entre los alcaldes y sus consejos. Estamos cansados de las crisis politiqueras. Para todo esto ejerzamos nuestro poder con patriotismo y pensando en nuestro futuro. (O)