A propósito de la próxima chatarrización de los vehículos retenidos en los canchones de la ATM (Agencia de Tránsito y Movilidad) y el listado de los propietarios, cabe resaltar la horrenda injusticia que está llevando a cabo con ellos, ya que los compradores de sus automotores nunca pusieron en orden la documentación de dichos vehículos; y varios años después de vendidos, se pretende obligar a los expropietarios a cancelar los valores de bodegaje por retención de los vehículos, esto, sin previo aviso, entiéndase que debería haberse hecho cuando retuvieron el vehículo, no años después cuando la situación económica no permite pagar o hacer convenio por miles de dólares de un automotor que ya se encuentra inservible.

Esperamos que se tomen los debidos correctivos en futuras ocasiones. Mientras tanto, los perjudicados deben ingeniarse para pagar las deudas, de las cuales no fueron los causantes. (O)

Jennifer Demera Vargas, abogada, Guayaquil