En Ecuador, ocho universidades privadas se han quedado sin fondos monetarios correspondientes al valor de casi $12′000.000 destinados a las becas de sus estudiantes con escasos recursos. Es una verdadera preocupación para los rectores de estas instituciones, obligados a reajustar recursos de gastos en infraestructura y tecnología.

Como estudiante de una de esas universidades, pienso que esto ocasionará más caos económico, estudiantil, pues podrían cerrarse las puertas y las oportunidades a los aspirantes y a los estudiantes de recursos medios y bajos a la educación superior. Debemos recordar que las universidades públicas tampoco cuentan con cupos e instalaciones suficientes para recibir una sobrecarga de jóvenes cuyos exámenes de ingreso están en mecanismo de prueba. (O)

Sammy Rivera Carrera, Quito