Muy dura, muy difícil tiene que ser la tarea de los científicos de la policía para poder detectar el ADN en muchos restos humanos incompletos, quemados, desgarrados, descompuestos durante la masacre entre reos de la Penitenciaría del Litoral; y poder descubrir las identidades.

Debe demorar un estudio en el cual tienen que realizar las reconstrucciones minuciosas de las características, en el laboratorio de criminalística y ciencias forenses. Insultan a médicos, químicos, investigadores legistas de la policía que entreguen enseguida los cadáveres. El trabajo tiene que ser profesional, no se va a tomar partes de los restos de diferentes cadáveres para ‘resolver’ que fue de una misma persona. Los científicos han estudiado y saben bien su trabajo. Debemos comprender con paciencia, con el objeto de permitir que los científicos hagan los trabajos, pericias, correspondientes. (O)

Lisímaco Villarreal, vía a Daule

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