Me extrañó sintonizar mi radio favorita y escuchar “extrañaremos a la familia Oquendo”. Quedé estupefacta al no tener más detalles, me encontraba manejando hacia la escuela de mi hijo pequeño y me confundió el pensar que podría haber una manera en que Radio Visión saliera del aire. Pensé que era un malentendido, pero a medida que avanzó la tarde pude enterarme de que efectivamente la radio más respetada del país cerró sus puertas el 29 de julio de 2022. Me alegra dar testimonio y haber vivido todo lo rico de lo que entregó por más de 35 años al país.

Por otro lado, siento que las nuevas y futuras generaciones quedan huérfanas y sin un referente de periodismo serio, respetuoso y nutritivo, porque a pesar de que sus caras visibles siempre fueron frontales respecto a sus puntos de vista personales, nunca ningún entrevistado, afín o no a su visión, fue recibido sin la amabilidad, profesionalismo y cordialidad que caracterizó a todos los espacios de la tan querida radio. Esta familia es para mí y para millones de ecuatorianos referente de trabajo, dedicación, seriedad y por qué no decirlo, de una empresa familiar exitosa donde cada uno supo brillar desde su propio talento.

Siempre admiré cómo se evidenció en cada detalle el gran respeto a la línea editorial de todo lo que se trabajó, y la impecable línea de contenidos que siempre fue consistente con los valores bien definidos como medio de comunicación y como personas. Gracias por el deber cumplido y que viva la vida. (O)

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Paula Marcela Pettinelli Gallardo, máster en Marketing y Comercialización, Guayaquil