Aprecio mucho el valor que tiene el político, empresario y presidente de El Salvador, Nayib Armando Bukele Ortez, es mi apreciación a las ponderaciones de la prensa mundial por la administración de su país; lo consideran un bizarro esforzado con determinación aguerrida para conducir su patria que está ultrajada por la corrupción.

Siga adelante con su arduo trabajo reivindicador que necesita El Salvador, señor Bukele. Desde mi amado Ecuador, cuna de grandes héroes libertadores, escribo al presidente salvadoreño, convencido de su combate a los corruptos. Reúne sabias enseñanzas que muchos mandatarios deberían practicarlas, ejemplo el de Ecuador, porque vivimos asediados de malandros, narcotraficantes, sicarios, delincuentes, que tienen al pueblo ecuatoriano rezando a Jesús. Don Guillermo Lasso al que acertadamente lo elegimos presidente del Ecuador, debe seguir los pasos del salvadoreño Bukele, con toda valentía sin mirar a atrás. El pueblo le respaldará la gestión de combate a la corrupción. Estamos en Ecuador asediados por vagos del comunismo perverso, faltan mazmorras para encerrar a los corruptos. Hay malandros por todos los lares del planeta. (O)

Carlos Aquiles Vicuña Prieto, Quito