Soy una paciente con problemas renales y a pesar de tener 32 años, desde hace cuatro y medio tengo que someterme a diálisis tres veces por semana en un centro que tiene convenio con el IESS. Ahí acuden cerca de sesenta pacientes diariamente a someterse a dicho tratamiento.

Hasta hace más de un año, en el Hospital Teodoro Maldonado Carbo del IESS me estaba haciendo los exámenes para un trasplante de riñón, que sería mi mejor regalo. Las evaluaciones y los trasplantes han sido suspendidos por las autoridades debido a la pandemia. Por lo precario de mi salud, y a pesar de no ser de la tercera edad, quisiera saber si dentro del programa de vacunación contra el COVID-19, del Ministerio de Salud (MSP), se nos va a tomar en cuenta a las personas que tenemos esta condición, pues al salir de casa estamos muy expuestas a ser contagiadas. (O)

Carmen Cargua Quishpe, Guayaquil