El funcionamiento negativo de la Asamblea nos hace recordar las acciones antipatrióticas de políticos que durante 10 años y más se apoderaron del Ecuador, acomodando a su medida leyes y reglamentos para socavar la tranquilidad, la economía, las obras; acorralándonos como animales a los ciudadanos de bien; a muchos los mandaron a la cárcel con leyes y jueces ajustados a ese sistema.

Igual, algunos dirigentes indígenas que siempre han ‘llorado’ porque los españoles invadieron estas tierras de América el 12 de octubre de 1492, siguen reclamando por cualquier cosa que se les ocurre presentándose como víctimas. No meditan que todos quienes nacimos en este país somos herederos de esa nefasta época de invasión, pero debemos seguir adelante sin lloriqueos y reclamaciones de antaño poniéndose en contra de todo gobierno que empieza, sin meditar las consecuencias negativas. Es urgente un cambio radical, rectificar el tremendo bache que nos dejaron en la economía, las malas leyes prodelincuenciales, las drogas, las malas costumbres, la corrupción; se debe arreglar en forma rápida. Pero indigna que ciertos asambleístas e indígenas quieren un pueblo atrasado, propicio para pescar a río revuelto, no piensan que con la unión de esfuerzos se resuelven los problemas. De continuar con el despilfarro, no recuperar lo robado y oponiéndose a los cambios urgentes, el país será aniquilado. (O)

Rodolfo López Osorio, arquitecto, Guayaquil