Sepamos ‘apreciar’ nuestra ‘obra de teatro’ llena de contenido y emociones, digna de la mejor de las tramas de una sociedad caótica. Algunos de los pasajes del drama de corrupción son:

Un sistema político con cinco poderes. Un sistema judicial politizado. Un órgano de control politizado. Un órgano parlamentario que concurre a ilegalidades procedimentales. Una corte que rige las normas entre los poderes del Estado, que no es capaz de verificar la autenticidad de un contrato y da paso a un juicio que puede derrumbar la democracia. Cuerpos intermedios que avalan la violencia y la corrupción. Terror y violencia en calles. ¡Y mucho más!

Cada pasaje de esta ‘obra’ ha sido escrita por cada uno de nosotros, ecuatorianos. ¿Cuándo empezamos a corregirla? (O)

Publicidad

Ignacio Frixone Naranjo, estudiante de Ingeniería Comercial y máster en Economía-Minor en Ciencias Políticas; Santiago de Chile