Entidades privadas prestan un gran servicio a la comunidad del que estamos todos agradecidos, mas lamentablemente hay ciertas normas incomprensibles como, por ejemplo, no consideran al usuario como sujeto de descuentos y facilidades si son afiliados al IESS.

Por lo tanto, sería justo y necesario que deroguen esa inconsulta medida ya que como entes al servicio de la comunidad algunos con financiamiento de origen público, no pueden hacer discrimen a nadie, menos a quienes están afiliados a una entidad deficiente en servicios médicos por el exceso de usuarios, ya que se presta asistencia a hijos de afiliados sin financiamiento, lo que ocasiona el colapso del sistema agravado por la pandemia. (O)

María Anunzziata Llerena Naranjo, Guayaquil